
La artista suiza Frédérique Bangerter es cofundadora de la Editorial CABEZA DE CHORLITO, creada en 2011 junto con Alberto García-Alix no se ajusta a ninguna línea editorial definida. Han ido hacia delante, contra todo pronóstico, y siguen con la voluntad de incubar huevos de creación alumbrando futuros chorlitos. SER UN CABEZA DE CHORLITO es una expresión que se utiliza para referirse a alguien que tiene poca cabeza o que es especialmente despistado. Los chorlitos son esos pájaros que solemos ver corriendo por las playas persiguiendo un cangrejo. Son pequeños, de patas largas y cuello tan robusto que apenas se distingue dónde acaba este y dónde empieza la cabeza. La idea de que los chorlitos son tontos viene de su costumbre de excavar sus nidos en las playas dejándolos sin ningún tipo de protección. También son sumamente despistados; no reconocen sus propios nidos, por lo que acaban empollando o alimentando el nido equivocado. ¿Cómo ha podido sobrevivir un pájaro que deja a sus criaturas expuestas a tantos peligros? Muy sencillo: porque el pragmatismo no siempre lleva la razón.